El Real Madrid se ha impuesto al siempre combativo Alavés por 3-0 en un encuentro clave para la lucha por LaLiga por parte local y complicado, tanto por el rival como por ser después de una semana FIFA. Karim Benzema, quien sigue libre de compromisos internacionales con Francia, adelantaba a los madridistas en posición dudosa, prolongando de este modo su inspiración ofensiva en este curso, con su novena diana liguera. Isco daba la tranquilidad en el tramo final, como colofón a un completísimo partido del malagueño, y Nacho cerraba la cuenta.
El conjunto dirigido por Zinedine Zidane arrancaba el partido con una defensa inédita que sufría pronto alteraciones con la prematura lesión de Varane . Por su parte, los albiazules demostraban en los primeros minutos por qué son la revelación del campeonato, cerrando espacios, obligando a los merengues a buscar disparos desde la distancia. Tuvo que ser el galo, quien está viviendo una segunda mitad de temporada sobresaliente, el que iniciara y terminara la jugada del gol, asociándose con Carvajal y batiendo al canterano Pacheco en posición dudosa.
El cuadro vitoriano empezó a discutir la posesión al Madrid tras el descanso, mostrando las credenciales del finalista de esta edición de la Copa, ahogando el centro del campo merengue y generando ocasiones por los flancos, provocando las dudas en Chamartín.
Cuando la grada empezaba a inquietarse, a la vez que el plantel vasco asomaba más en las indemnizaciones de Casilla, Isco culminaba un contraataque, en un encuentro muy completo del malagueño, quien se ha fajado en defensa y ha obtenido su botín en ataque con un tiro casi sin ángulo. El 3-0 era de Nacho, cabeceando a las mallas un potente chut de falta de Ronaldo que se había estrellado en el larguero. Un excesivo rédito ante un buen oponente.
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