Es el riesgo de este tipo de amistosos. Demasiados cambios, muchas caras nuevas...algo de peligro. Luego de perder en el debut de la ICC por penaltis ante Manchester United, tras igualar 1 a 1, el Real Madrid sufrió una dura caída por 4 a 1 ante el Manchester City, en el segundo encuentro de este torneo, en Los Ángeles. Ahora, el sábado próximo tendrá revancha ante el Barcelona, en Miami.
Con las ausencias de Ronaldo y Kroos, Zidane apostó a un equipo que podría considerarse "titular". En la primera parte, al Real Madrid le faltó agresividad, más allá de las buenas conexiones que se dieron entre Isco y la línea de mediocampistas (Modric, Casemiro y Kovacic).
En el complemento, como lo hicieron todos los entrenadores en el torneo, Zidane hizo borrón y cuenta nueva y cambió prácticamente a todos sus jugadores. A los 52, Otamendi aprovechó un rebote para abrir el marcador. Sterling, con una buena definición ante Kiko Casilla estiró la ventaja. Stones hizo más grande la diferencia y Brahim Díaz convirtió la historia en goleada. Sobre el final, Oscar, una de las joyas de la cantera del Madrid, marcó el descuento.
El sábado, el equipo de Zidane tendrá revancha en un Clásico atípico. Aunque no sea más que un amistoso, a nadie del Madrid le agrada perder 4 a 1...
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